Dar una fiesta es siempre motivo de alegría y celebración. Dependiendo de lo formal o informal del evento, podemos decorar de una manera más sofisticada o menos.
Hay que tener en cuenta el tipo de invitados que vamos a tener... su nivel social y sus gustos, el carácter de la fiesta dependerá de lo que se espera de ella...

No es lo mismo dar una merienda para celebrar un cumpleaños de niños que celebrar una reunión de trabajo formal o con clientes de tu negocio.
En "hablando en plata" quiero recuperar estas fiestas formales, donde sacamos la plata, la vajilla buena de las fiestas, y dar ese toque de glamour y elegancia que la plata siempre da a nuestras mesas.
Cada vez que me ofrecen cubiertos de plata para comer, me siento importante!
Y no es necesario que sean de plata... de 1000 kilates.. basta que sean chapados, de alpaca...o de cualquier aleación plateada que hay en la actualidad y de las que no te tienes que preocupar en limpiar como antaño.
Como siempre os digo, dependiendo del número de comensales, deberemos pensar en el tipo de fiesta que tenemos que proponer...
Un buffet si somos muchos....o una mesa formal si somos menos de 12 personas, aunque obviamente dependerá de los servicios con los que contemos y del espacio que tengamos para disponer la mesa.
No os olvidéis de mezclar la plata con el cristal... es una combinación perfecta sofisticada y muy elegante en cualquier espacio...

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